El cien cabezas es un pez creado por el karma de unas palabras, por su póstuma repercusión en el tiempo.
Una de las biografías chinas del Buddha refiere que éste se encontró con unos pescadores, que tironeaban de una red. Al cabo de infinitos esfuerzos, sacaron a la orilla un enorme pez, con una cabeza de mono, otra de perro, otra de caballo, otra de zorro, otra de cerdo, otra de tigre, y así hasta el número cien. El Buddha le preguntó:
—¿No eres Kapila?
—Soy Kapila —respondieron las cien cabezas antes de morir.
El Buddha explicó a los discípulos que en una encarnación anterior, Kapila era un brahmán que se había hecho monje y que a todos había superado en la inteligencia de los textos sagrados. A veces, los compañeros se equivocaban y Kapila les decía cabeza de mono, cabeza de perro, etc. Cuando murió, el karma de esas invectivas acumuladas lo hizo renacer monstruo acuático, agobiado por todas las cabezas que había dado a sus compañeros.
PD: Cuidado con lo que decís o hacéis, ya que si por algún casual la religión budista es la correcta, podríais reencarnaros en cosas muy raras...
Madre mia, cien cabezas multiusos , la pregunta es ¿las cabezas carnivoras se comían a las cabezas herbivoras? Tiene que ser bastante gracioso ir a pescar, que te salga un monstruo de 100 cabezas te salga un gordo y le pregunte: Eres perico de los palotes, y responda si, y muera tras esto, sería bastante desconcertante xD.
ResponderEliminarBonita historia y bonita moraleja ;D
te he contado alguna vez el chiste del niño-cabeza?
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